Iguala: Cuatro intelectuales contra un México ''bañado en sangre''

La desaparición de 43 estudiantes tras un ataque de policías y narcotraficantes en Iguala, estado de Guerrero, cumple un mes este domingo y revela que México es un país “bañado en sangre” con autoridades que hacen que la historia se repita, coincidieron una serie de intelectuales de ese país.

En primer lugar, la escritora Elena Poniatowska, conocida por su activismo de izquierda y quien a sus 82 años ha participado en varios actos para exigir la localización con vida de los jóvenes, puntualizó que “es muy terrible pensar que se cumple el mes y aún no hay una sola noticia”.

Para la ganadora del Premio Cervantes 2013, la desaparición de los universitarios demuestra “la sordidez” que se vive en “un país que está matando a su juventud”.

Los ataque contra los jóvenes de Ayotzinapa, que dejaron seis muertos y los 43 desaparecidos, fueron supuestamente ordenados por el prófugo alcalde de Iguala.

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De confirmarse la muerte de los jóvenes, esta sería la peor “masacre” desde que militares mataron al menos a 44 estudiantes que protestaban en la capital mexicana el 2 de octubre de 1968, aseguró Poniatowska, autora de La noche de Tlatelolco, libro que aborda este episodio negro de la historia de México.

Por su parte, el escritor Juan Villoro indicó que estamos ante “una situación durísima, pero debemos entender que esto viene desde muy lejos, que tiene raíces muy objetivas y es algo que se podría haber evitado”.

Tras recordar matanzas como la de Iguala en 1962, cuando ocho personas fueron asesinadas en un mitin electoral, o la de Aguas Blancas de 1995, con 15 campesinos muertos, Villoro señaló que en Guerrero “hay caciques locales desde hace mucho y gobiernos extraordinariamente corruptos que han reprimido una y otra vez las demandas populares”.

En tanto, el poeta Javier Sicilia, líder del Movimiento por la Paz, denuncia desde hace años la ausencia del Estado o que es cómplice en muchas zonas de México. En esa línea, manfiestó que la desaparición de los estudiantes es “la muestra de un desastre, es la punta del iceberg de algo que quisieron ocultar durante todo este sexenio”.

“Si no entendemos bien la dimensión de la tragedia humanitaria que está viviendo el país desde hace muchos años, vamos a seguir hundiéndonos más en este pantano infernal y aguardar a la próxima masacre”, añadió este poeta que no escribe un verso desde que el asesinato de su hijo en 2011.

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Finalmente, el pintor Francisco Toledo no solo condenó la desaparición de los jóvenes, sino también calificó de triste y vergonzosa la complicidad de la política en este caso.