(Foto: Flickr Jornada Mundial de la Juventud)

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En un noble gesto, el papa Francisco telefoneó a una compatriota argentina hospitalizada en Leiria, en el centro de Portugal, para darle consuelo y asegurarle que orará por la mejoría en su salud, según un comunicado publicado en la página web de la diócesis Leiria-Fatima.

El pontífice llamó el domingo a Stella Maris Kriger, una fisioterapeuta de 61 años que padece un “cáncer de pecho en estado avanzado” para decirle que “iba a rezar por ella y bendecirla” y que incluso tuvo que marcar dos veces pues “la enferma no pudo contestar a la primera llamada”.

En el comunicado se indica que la paciente afirmó que este “fue uno de los momentos más memorables de mi vida”, por lo que quedó profundamente conmovida por el gesto del papa.

La paciente permanece en el hospital Santo Andrés en Leiria y fueron sus amigos y un periodista en Roma quienes alertaron al pontífice sobre el estado de salud de Stella Maris Kriger sin imaginar que él la llamaría personalmente.

ABOGÓ POR UN FUTURO DE RECONCILIACIÓN TRAS GUERRA CIVIL

El papa Francisco abogó por un “futuro de reconciliación” tras la “terrible violencia” de los más de 30 años de guerra civil en Sri Lanka, esto durante una oración en el santuario mariano de Madhu, donde la mayoría son budistas.

Pidió que “todos los hombres encuentren aquí el ánimo y la fuerza para construir un futuro de reconciliación, justicia y paz”.

ENLACE: PAPA FRANCISCO PIDE QUE EN 2015 SE TERMINEN LAS GUERRAS EN EL MUNDO

“Muchas personas, tanto del norte como del sur, fueron asesinadas en la terrible violencia y derramamiento de sangre de aquellos años. Los habitantes de Sri Lanka no pueden olvidar los trágicos acontecimientos ocurridos en este mismo lugar”, aseguró el papa Francisco.

El pontífice quien pidió que no se aludan las responsabilidades del pasado, agregó que “pedimos también la gracia de reparar por nuestros pecados y por todo el mal que esta tierra ha conocido”.

Madhu, situado en el norte de la isla de mayoría tamil, es un lugar muy simbólico que estuvo en la línea del frente durante los combates entre el ejército y los rebeldes tamiles, que fueron derrotados en 2009.