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“Jamás cometí delito alguno ni en el Perú ni en otro lado. Hoy en día temo por mi seguridad no solo jurídica, sino por mi vida en el Perú, por eso estoy aquí en Bolivia tratando de demostrar que no cuento con las garantías suficientes para ser debidamente juzgado en mi país”, dijo el prófugo empresario peruano Martín Belaunde Lossio al justificar su pedido de refugio ante la Comisión Nacional de Refugiado de Bolivia (Conare).
Acompañado de su abogado Jorge Valda, el ex asesor de campaña del hoy presidente Ollanta Humala sustentó durante siete horas las razones por las que se considera un perseguido político en nuestro país. Incluso presentó documentos e información que, según Valda, sustentarían la invalidez de los dos delitos – asociación ilícita y peculado – por los que es acusado en el Perú.
La sesión se desarrolló el martes desde las 9:30 am (hora peruana) en la sede de la Cancillería boliviana en La Paz a fin de eludir a los periodistas que aguardaban la llegada de Belaunde Lossio en los exteriores de la Conare, que queda a unas cinco cuadras de la sede diplomática.
Martín Belaunde Lossio podría ser citado nuevamente por la Conare para hacer precisiones en el caso. La comisión tiene tres meses para resolver su situación.
ENLACE: Martín Belaunde Lossio sustentó en Bolivia pedido de refugio
“Se ha cumplido con todos los requisitos y todas las exigencias. Él ha presentado documentación y toda la información que tenía a su alcance para que se considere que su persecución en el Perú ha sido motivada por afanes netamente políticos”, dijo Jorge Valda a su salida de la Cancillería de Bolivia.
El abogado indicó que Martín Belaunde Lossio vivirá por el momento, y por razones de seguridad, en La Paz, al parecer en un barrio residencial de la zona de Achumani, al sur de la capital boliviana. Además, comunicó que su patrocinada no darás más declaraciones a la prensa.
CANCILLER LE RESPONDE
Tras una reunión con los miembros de la comisión del Congreso que investigan el caso de Martín Belaunde Lossio, el canciller Gonzalo Gutiérrez remarcó que el empresario “no es un perseguido político” y, por lo tanto, “no tiene nada que temer”.
En la sesión reservada, de la que también participaron los ministros de Justicia, Daniel Figallo, e Interior, Daniel Urresti, quedó claro que la posibilidad de que el ex asesor de campaña del presidente Humala sea expulsado de Bolivia está casi descartada, según El Comercio.