El 97% de los abortos peligrosos se realizan en África, Asia y América Latina. (Foto: EFE)
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Unos 25 millones de abortos inseguros se practican cada año en el mundo, según la Organización Mundial de la Salud (OMS). La mayoría de interrupciones voluntarias del embarazo son clandestinas y en países en desarrollo.
El 45% de las 55,7 millones de casos en total se realizan en condiciones peligrosas, de acuerdo a un estudio de la OMS y el Instituto Guttmacher difundido hoy jueves 28, día internacional por el aborto seguro.
En el informe, publicado en la revista científica The Lancet, se analizan datos de 182 países. Una conclusión es que el 97% de los abortos peligrosos se producen en África, Asia y América Latina, donde se suman las barreras a métodos anticonceptivos eficaces.
“Cuando las mujeres y las niñas no pueden acceder a servicios eficaces de anticoncepción y aborto seguro, hay graves consecuencias para su propia salud y la de sus familias. Esto no debería pasar. Sin embargo, pese a la evidencia y a los recientes avances en materia de tecnología, siguen produciéndose demasiados abortos peligrosos y demasiadas mujeres continúan sufriendo y muriendo”, alerta, citada por El País, Bela Ganatra, del departamento de Salud Reproductiva de la OMS y autora principal del estudio.
En América Latina, al menos cinco países prohíben el aborto completamente, solo uno de cada cuatro intervenciones es segura. No se ha abandonado el uso de ácido, de sondas o de hierbas, sobre todo áreas rurales. En El Salvador hay al menos 24 mujeres presas por delitos relacionados con el aborto. Asimismo, en México y Honduras.
Para la OMS, los abortos nada seguros son un 14% de esos 25 millones. La mayoría se basa en la introducción de objetos extraños y el uso de brebajes de hierbas, con predominancia en África o Asia.
En esos Estados se sentirán los efectos nocivos de las políticas de Donald Trump, quien vetó a las entidades que tengan proyectos relacionados con el aborto en países en desarrollo, sin ditinguir programas para luchar contra el aborto inseguro.
Por cada 10 millones de dólares recortados, unas 440.000 mujeres y parejas se quedarán sin servicios de contracepción, se producirán 95.000 embarazos no planificados, incluidos 44.000 nacimientos no planeados, se realizarán 38.000 abortos (de los cuales 30.000 serán inseguros) y se producirán 200 muertes maternas más al año en todo el mundo, alerta el Instituto Guttmacher.
