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Ariel Castro, acusado del secuestro de tres mujeres durante una década en Ohio, aceptó un acuerdo con la fiscalía de prisión de por vida sin libertad condicional.
Con este trato, Castro, de 53 años, se salva de la pena de muerte por los 977 delitos de los que se le acusa, entre ellos secuestro, violación y asesinato por la terminación de los embarazos de una de las mujeres que mantuvo en su casa de un suburbio de Cleveland, rescatadas en mayo de este año.
El acusado raptó a Michelle Knight (32), Amanda Berry (27) y Gina DeJesus (23) entre 2002 y 2004 ofreciéndolas llevarlas en su carro. Durante el cautiverio, Berry concibió una hija de su captor, actualmente de seis años.
Bajo el acuerdo, Castro aceptó una sentencia de 1.000 años en prisión, ser etiquetado como un delincuente sexual y el perder el derecho a sus propiedades. El trato lo protege de otros cargos y la pena de muerte, informó BBC News.
En la audiencia, Castro reveló al juez que fue abusado de niño. Aseguró que esto, además de su adicción a la pornografía y sus problemas sexuales, han tenido consecuencias en su salud mental.
El 9 de julio, Knight, Berry y DeJesus aparecieron en un video donde agradecían el apoyo recibido y pedían a la prensa seguir respetando su privacidad mientras se recuperaban.
