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En una sesión que duró menos de una hora, el pleno del Congreso dejó sin efecto las tres resoluciones que oficializaban las designaciones de autoridades para el Tribunal Constitucional (TC), Defensoría del Pueblo y Banco Central de Reserva.
El rechazo de la población y de la prensa a las dos primeras fue unánime y motivó protestas en las calles de Lima. La tercera, sin embargo, no generó cuestionamiento y el respaldo a las cualidades académicas y éticas de Gustavo Yamada, Drago Kisic y Francisco González nunca estuvo en entredicho.
Pese a ello, el pleno decidió dejar sin efecto la designación de los tres directores del BCR con 99 votos a favor, uno en contra y cinco abstenciones. Para anular la resolución, se requería de 67 adhesiones. En la misma sesión se dio marcha atrás en el nombramiento de magistrados del TC y defensor del Pueblo.
Aún no hay datos concretos sobre qué camino seguirá el Parlamento ahora que dejó sin efecto los nombramientos. Se presume que en agosto se designaría una comisión multipartidaria para seleccionar a los nuevos candidatos. No obstante, recién dentro de seis meses habría noticias sobre este tema.