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La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) condenó hoy la ejecución en Texas del mexicano Ramiro Hernández Llanas y subrayó que se trató de una violación de los derechos fundamentales del reo. Asimismo, consideró que hubo incumplimiento de los compromisos internacionales por parte de Estados Unidos.
A pesar de los llamamientos internacionales, el estado norteamericano de Texas desatendió las solicitudes de revisar la sentencia y aplicó la inyección letal a Hernández Llanas este miércoles 9.
Su caso estaba incluido en el fallo Avena de la Corte Internacional de Justicia (CIJ), que le exige a Estados Unidos revisar medio centenar de condenas a muerte de mexicanos y otros migrantes a quienes no se les respetó su derecho a asistencia consular.
El fallecido contaba también con medidas cautelares que le había otorgado la CIDH a finales de marzo precisamente para intentar detener su ejecución hasta que pudiera revisar su caso.
“Deploramos la falta de cumplimiento de Estados Unidos y del estado de Texas con las medidas cautelares, algo que contraviene sus obligaciones internacionales derivadas de la Carta de la Organización de Estados Americanos y de la Declaración Americana en vigor desde que Estados Unidos se incorporó a las OEA en 1951”, dijo el organismo en un comunicado.
En la víspera, el presidente de la CIJ, Peter Tomka, también había lamentado el nuevo incumplimiento por parte de Estados Unidos del “fallo Avena” y subrayó que ello afecta a la “credibilidad” de Washington cuando llama a otros países a cumplir con sus obligaciones internacionales.