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El papa Francisco partió esta mañana desde Río de Janeiro hasta Aparecida, donde oficiará su primera misa en Brasil, país en el que se encuentra en su primera visita oficial internacional para presidir la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ).
La comitiva salió del Arzobispado de Sumaré, donde se aloja Jorge Mario Bergoglio, y se dirigió al aeropuerto para partir. Miles de brasileños esperan desde el martes por la noche en las afueras del santuario de Nossa Senhora para participar de la misa que oficiará el primer pontífice argentino de la historia.
Francisco se movilizó hasta el terminal aéreo en un automóvil discreto y con las ventas abiertas. Durante el trayecto, cientos de personas lo vieron y se acercaron al vehículo para saludarlo. El papa viajó luego un avión VC-2 Embraer 190 de la Fuerza Aérea de Brasil rumbo al aeropuerto de Sao José dos Campos.
Antes de la misa, Bergoglio tiene previsto orar en privado frente a la imagen de la Patrona de Brasil. Según el Episcopado, a Nossa Senhora llegarán entre 150.000 y 200.000 personas, aunque solo 15.000 podrán entrar al templo. El resto seguirá el oficio religioso a través de pantallas dispuestas al exterior de la iglesia.