En Cúcuta se encuentra uno de los tres puntos de recepción y almacenamiento de víveres y medicinas para los venezolanos. (Foto: EFE)
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Tegucigalpa. El gobierno de Honduras envió este viernes tres aviones militares cargados con dos toneladas de ayuda humanitaria para Venezuela, anunció el director de la Comisión Permanente de Contingencias (Copeco), Lisandro Rosales.
Las aeronaves salieron desde la base aérea Hernán Acosta Mejía, en Tegucigalpa, con destino a la ciudad colombiana de Cúcuta, fronteriza con Venezuela, con alimentos, artículos de higiene personal y primeros auxilios.
Está previsto que el envío llegue este mismo viernes a la ciudad colombiana, donde será recibida por diplomáticos hondureños y un equipo de trabajo del presidente encargado Juan Guaidó.
De acuerdo con la canciller hondureña, María Dolores Agüero, el envío de ayuda hacia el paso fronterizo de Cúcuta es una acción que busca contribuir a “la recuperación de la paz en la región y el proceso de transición democrática en Venezuela”, pero especialmente, paliar “el sufrimiento de miles de venezolanos”.
“Hemos tomado la decisión de extender esta acción solidaria y esta mano solidaria de Honduras hacia nuestros hermanos venezolanos”, dijo la jefa de la diplomacia hondureña a los periodistas.
En Cúcuta se encuentra uno de los tres puntos de recepción y almacenamiento de víveres y medicinas para los venezolanos. Los otros dos están en el estado brasileño de Roraima, limítrofe con Venezuela, y en la isla de Curazao, un territorio autónomo de Países Bajos situado en el mar Caribe.
El líder del chavismo, Nicolás Maduro, rechaza el ingreso de la ayuda humanitaria internacional que fue solicitada por Guaidó, que es reconocido como gobernante interino venezolano por unas 50 naciones.
Honduras integra el llamado Grupo de Lima, junto con Argentina, Brasil, Colombia, Costa Rica, Chile, Guatemala, México, Panamá, Paraguay, Perú y Santa Lucía, una plataforma creada por iniciativa del gobierno peruano para denunciar un quiebre del orden democrático en Venezuela ante la creación de la Asamblea Nacional Constituyente, cuya legitimidad no reconoce.
El Grupo de Lima subrayó el 25 de febrero que la transición democrática en Venezuela tiene que ser llevada a cabo por los venezolanos “pacíficamente y al amparo de la Constitución”.
El organismo le pidió a la Corte Penal Internacional (CPI) que “tome en consideración” la “grave situación de Venezuela y la denegación del acceso a la asistencia humanitaria, que constituye un crimen de lesa humanidad”.
Fuente: EFE
