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Bogotá. El lunes los colombianos fueron testigos de una escena digna de una película de acción. Aída Merlano, elegida como senadora para el periodo 2018-2022, cargo que no llegó a ejercer, había fugado de la guardia que la vigilaba desde que fue sentenciada a 15 años de prisión por haber comprado votos para su elección.
La noticia ha causado indignación en políticos y en mismos los colombianos que se han manifestado en redes sociales para pedir que los involucrados asuman sus responsabilidades. Este miércoles tuvieron que dejar sus cargos el director del Inpec, general William Ernesto Ruiz, y la directora de la cárcel El Buen Pastor, Diana Muñoz, donde se encontraba recluida.
Aída Merlano Rebolledo, 43 años, natural de Barranquilla, abogada y representante al Congreso por el partido Conservador, había asistido a una cita odontológica que duró más de tres horas, tiempo suficiente para terminar de concretar su fuga, según indica la revista Semana de Colombia.
Ayudada de una cuerda, la excongresista saltó por una de las ventanas del tercer piso de la Clínica de la Sabana en Bogotá, afuera la estaba esperando un motociclista de repartos que trabajaba para el aplicativo Rappi.
Los dos agentes de seguridad que la acompañaban se quedaron esperando afuera del consultorio a que Merlano terminara. Lo que sorprende es que la cita médica se extendió por más de tres horas y en ningún momento cayeron en la cuenta que Merlano podía intentar fugar.
Cuando ingresaron al consultorio, el dentista no pudo explicar lo que había ocurrido.
En las imágenes del video de seguridad en las que se aprecia a Merlano cayendo al piso, también se ve a transeúntes que se quedan sorprendidos por lo que acababan de ver. Se nota claramente que unos jóvenes se preocupa por saber si aquella persona que se había lanzado por una ventana se encontraba bien y no había sufrido alguna lesión.