(Foto: polanri/Flickr)

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Un programa gubernamental en Ámsterdam, capital de los Países Bajos, ofrece a los alcohólicos cerveza a cambio de recoger la basura de las calles.

“No estoy orgulloso de ser un alcohólico, pero estoy orgulloso de tener un trabajo nuevamente”, aseguró Fred Schiphorst (60), un exobrero que estuvo desocupado durante casi una década a causa de una lesión en la espalda y sus problemas con la bebida.

Es así que uno de los miembros de este programa comienza su día con dos cervezas, la primera parte de su sueldo que consiste casi en su totalidad en alcohol. Otras dos latas le son entregadas durante el almuerzo, el cual también es subvencionado. El día termina con un pago de 10 euros (unos S/.38), la entrega de medio paquete de tabaco y, dependiendo de la efectividad de labor realizada, una o dos cervezas más.

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La iniciativa comenzó el año pasado por De Regenboog Groep (Fundación Arcoíris), un grupo que ayuda las personas sin hogar, los drogadictos y los alcohólicos a recuperarse. El programa es tan popular que hay una gran lista de espera para los voluntarios.

“Si les dices (a los alcohólicos) ‘deja de tomar y te ayudaremos’ no funciona”, indicó al The New York Times el director de esta fundación, Hans Wijnands. “Pero si les decimos ‘te daré trabajo por unas latas de cerveza durante el día’ a ellos le gusta”, añadió.

La alcaldesa de Ámsterdam del este, Fatima Elatik, apoya el proyecto, aunque como una musulmana debe desaprobar el consumo de alcohol. Indicó que los adictos “no puede ser aislados” y que se les exija que se recuperen. “Es mejor darles algo que hacer y restringir su consumo a una cantidad limitada de cerveza con ningún licor fuerte”.

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Sin embargo, el programa no está exento de críticas, y regidores conservadores de Ámsterdam aseguran que el “proyecto cerveza” es una pérdida del dinero del gobierno y una muestra más de la cultura de tolerancia que convirtió a la ciudad en una centro de atracción para los usuarios de marihuana.

Wijnands rechazó las críticas, asegurando que “está de moda el apoyar medidas represivas”. Añadió que sería “hermoso si los alcohólicos dejaran completamente de beber, pero esa no es nuestra meta principal. Tienes que darles a las personas una alternativa, mostrarles que existe otro camino aparte de holgazanear en el parque y beber hasta la muerte”.