Rodrigo Duterte y Xi Jinping. (Foto: EFE)

Rodrigo Duterte y Xi Jinping. (Foto: EFE)

Síguenos en Facebook



Los presidentes de China, Xi Jinping y Filipinas, Rodrigo Duterte, acordaron hoy en Pekín retomar el diálogo sobre sus tensiones en el mar de China Meridional, el principal escollo de las relaciones bilaterales en los pasados años.

Xi Jinping dijo a Rodrigo Duterte en el encuentro en el Gran Palacio del Pueblo de Pekín que “gestionar las diferencias sobre el mar de China Meridional a través del diálogo es una base importante para el crecimiento estable y saludable de las relaciones chino-filipinas”.

La disputa por varios territorios de esas aguas (el atolón de Scarborough e islas del archipiélago Spratly) han estancado las relaciones bilaterales en los últimos años, sobre todo a raíz de que China se hiciera con el control del citado atolón en 2012, zona de faena tradicional de pescadores filipinos.

Pese a que la Corte de Arbitraje Permanente de La Haya dio la razón a Filipinas el pasado julio, Rodrigo Duterte, investido en junio, ha preferido dejar de lado la sentencia y reiniciar el diálogo bilateral con China, tal y como quiere Pekín.

Así, hoy enfatizó que “las raíces de nuestros lazos son muy profundas y no pueden ser dañadas fácilmente”.

El presidente filipino ha dejado claro desde su llegada a Pekín el martes que su prioridad es hacer negocios con la segunda economía mundial, y hoy su homólogo chino aseguró que el país “está listo para lanzar la cooperación con Filipinas bajo la iniciativa de las nuevas rutas de la seda”.

Ambos líderes presidieron hoy la firma de trece acuerdos de cooperación bilateral, entre ellos uno entre la División de Narcóticos de China y el* Buró de Seguridad de China con la Agencia Antinarcóticos de Filipinas* (PDEA, en sus siglas en inglés).

Xi le dijo hoy a Duterte que China apoya los “esfuerzos” del nuevo Gobierno filipino en su lucha contra las drogas, el terrorismo y el crimen, que han causado más de 3.700 muertos en cuatro meses y suscitado las críticas de la comunidad internacional.

China, señaló el mandatario chino, tiene la “voluntad de participar activamente” en la construcción de infraestructura de la nación asiática – una de las prioridades de Rodrigo Duterte -, incluyendo autovías, puertos y otros, “para beneficiar al pueblo filipino”.

Agregó que Pekín también está “listo para animar a los empresarios chinos a que inviertan más en Filipinas y ayuden al crecimiento del país”.

Además, China anunció la suspensión de la advertencia a su población de que no viaje a Filipinas, lanzada con motivo de las tensiones territoriales.

Fuente: EFE