Síguenos en Facebook
Asunción. La Policía de Paraguay detuvo este martes a siete dirigentes del gremio de taxistas tras las protestas en Asunción contra las plataformas de transportes Uber y MUV, que desencadenaron congestiones vehiculares e incidentes en los que resultaron heridos algunos periodistas.
Los dirigentes fueron detenidos “debido a los incidentes y atropellos que se produjeron en las inmediaciones de la sede de la Municipalidad de Asunción”, afirmó el Ministerio Público en un comunicado.
Entre los detenidos se encuentra Arístides Morales, presidente de la Asociación de Profesionales Taxistas de Asunción (APTA), la principal de las organizaciones que se oponen a la actividad de Uber y MUV.
La Fiscalía argumenta que “los trabajadores del volante no solamente no respetaron su compromiso de no bloquear las arterias de tránsito sino que, a la vez, incitaron al descontrol de los ciudadanos”.
Las detenciones se produjeron después de que la Policía usara balines de goma y chorros de agua para dispersar a los manifestantes en la Avenida Mariscal López, que atraviesa por el frontis del edificio municipal y que fue bloqueado por los taxistas.
En este hecho resultaron heridos cinco comunicadores, algunos con balines de goma, lo que fue condenado por el Foro de Periodistas Paraguayos y la Asociación de Reporteros Gráficos en un comunicado conjunto.
La movilización de este martes, convocada por la APTA, una cooperativa de taxistas que opera en el Gran Asunción y una federación de alcance nacional, es seguida por la Fiscalía para cooperar con la Policía ante incidentes como los ocurridos en torno al edificio municipal.
También se reportaron incidentes menores en otros puntos de la capital, mientras que en Ciudad del Este, segunda urbe del país, la protesta arrancó con bloqueos intermitentes de la zona primaria del paso fronterizo con Brasil.
Los taxistas consideran que la implantación de estas nuevas empresas puede dejar sin empleo a 1,500 conductores de taxi en la capital paraguaya, lo que representa la mitad de los empleados tradicionales del sector.
Fuente: EFE