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FOTOS. El papa Francisco presidió la misa de Viernes Santo en la Basílica de San Pedro en el Vaticano, como parte de las conmemoraciones por Semana Santa.
En la misa de la Pasión de Cristo, se denunció “la preocupante indiferencia” de los responsables occidentales, ante la persecución de los cristianos en el mundo.
El predicador de la Casa Pontificia, el franciscano Raniero Cantalamessa condenó este viernes el atentado de yihadistas somalíes, quienes mataron a casi 150 personas en una universidad keniana, haciendo una división entre los musulmanes y los cristianos.
“Todos corremos el riesgo, instituciones y personas en el mundo occidental, de ser el Poncio Pilato que se lava las manos”, advirtió el predicador en la ceremonia presidida por el papa Francisco. Asimismo, denunció que no solo los cristianos son las víctimas de la violencia en el mundo.
Al iniciar la misa de la Pasión de Viernes Santo, el papa Francisco, vestido con una túnica roja, rezó en el suelo de la Basílica de San Pedro ante el alto mayor.
