Acapulco es resguardada por fuerzas federales. (Foto: Presidencia de México)
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Enrique Peña Nieto viajó hoy, por primera vez desde la desaparición de los 43 estudiantes de Iguala, al estado de Guerrero, donde ocurrió la tragedia que ha generado la mayor crisis de su gestión.
El presidente de México encabezará una actividad para la reactivación turística del balneario de Acapulco, cuya seguridad fue asumida por fuerzas federales luego de que anunciara medidas para combatir el crimen en el país.
Se tenía previsto que Peña Nieto visitara el miércoles 3 Iguala a fin de informar sobre los detalles de una nueva operación de resguardo para la región, pero finalmente decidió enviar a su ministro de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, y a la cúpula militar y policial.
ENLACE: México descarta juicio internacional por 43 desaparecidos de Iguala
“Peña Nieto puede ir a Acapulco, a Cocula, a Nueva York o recorrer el mundo, pero para nosotros sigue fallando a su compromiso”, manifestó Felipe de la Cruz, vocero de los padres de los normalistas que el 26 de septiembre fueron secuestrados por policías y sicarios del cártel Guerreros Unidos.
Los deudos han pedido la intervención de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y adelantaron que acudirían a la Corte Penal Internacional de La Haya si los procesados no eran imputados por los delitos de desaparición forzada y genocidio.
En respuesta, el canciller mexicano, José Antonio Meade, rechazó cualquier intento de investigación de un órgano supranacional a las autoridades del país, por considerar que solo sería justificado si el Estado no mostrara voluntad de resolver el caso. “México ha sido un país de los más abiertos en la región iberoamericana, ha invitado permanentemente para su cooperación a diferentes instancias de todo tipo”, subrayó.
