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FOTOS. Centenares de personas llegaron hoy al campo de desplazados de Jazer, al este de la ciudad de Mosul (norte de Irak), de la que han huido en los últimos días debido a los combates entre las fuerzas iraquíes y el grupo terrorista Estado Islámico (EI, ISIS o Daesh).

Al menos 2.000 personas del barrio oriental de Kukyeli, donde irrumpieron las tropas iraquíes a principios de la semana, arribaron hoy al campamento, después de abandonar sus hogares.

Los desplazados son familias, entre las que hay mujeres y niños, que se están reencontrando con sus parientes que vivían en otras áreas del norte de Irak que han sido recientemente arrebatadas ISIS, dentro de la gran ofensiva para expulsar a los radicales de la zona.

Algunos relataron a Efe que llevan casi dos años y medio sin ver a sus familiares, por lo que al reencontrarse han llorado, se han abrazado y han mostrado una gran alegría.

Una mujer de 49 años, llamada Omnayi, explicó que ya había encontrado a su primo en el campamento de Jazer y sigue esperando a su hijo, que se encuentra estudiando en Erbil, capital de la región autónoma del Kurdistán.

El joven Riad Yusef, uno de los hijos de una familia de cuatro miembros, aseguró a Efe que la ciudad de Mosul está ahora mismo destrozada y se mostró feliz por haber salido de ella.

“Parecía una cárcel grande, un infierno, nos torturaban por cualquier razón, como cortarnos la barba (algo prohibido por los yihadistas en sus territorios)”, detalló.

El director de la Sociedad de a Media Luna Roja iraquí en Erbil, Hawre Ihsan Sadiq, dijo a Efe que hasta ayer habían llegado hasta el campo de Jazer 500 familias y las de hoy aún no han sido contabilizadas.

Sadiq añadió que el campamento tiene capacidad para hasta 6.000 familias y las organizaciones humanitarias están preparadas para recibir a más desplazados de Mosul.

La ofensiva para arrebatar ISIS su principal feudo en Irak dio comienzo el pasado día 17 y en este tiempo unas 20.000 personas han abandonado sus casas por la violencia.

Fuente: EFE