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El arquitecto y profesor de la Universidad de California, Ronald Rael, diseñó e instaló un juego “sube y baja” en la misma valla que demarca la frontera entre USA y México.

Rael, junto a su esposa y también arquitecta Virgina San Fatello, se encargó de instalar este juego mecánico que llevó alegría a los ciudadanos de Nuevo México (USA) y Ciudad Juárez, Chihuahua (México).

Los niños que estaban cerca al lugar no dudaron en subirse al divertido y llamativo “sube y baja” color rosa, donde pasaron un agradable momento junto a sus padres y amigos. 

Incluso los creadores de este proyecto, que pertenecen al colectivo estadounidense Chopeke, se montaron en el “balancín” y de esta manera trataron de demostrar que existe un balance natural entre las familias mexicanas y del país vecino.

“Usar un sube y baja muestra que somos iguales, y podemos estar juntos jugando y divirtiéndonos… El muro corta éstos vínculos que tenemos”, expresó el arquitecto en su cuenta de Instagram.

“Mira, lo que sucede. Un lugar tiene un impacto en el otro, y eso es lo que exactamente hace un sube y baja”, agregó.

En medio de la crisis migratoria que atraviesan USA y México, jóvenes, niños y adultos, pudieron el domingo pasado pasar un rato de diversión y olvidar, al menos por unos minutos, sus problemas en la frontera.