Síguenos en Facebook
Las grandes empresas se están adelantando a los gobiernos en tomar la iniciativa en la resolución de la escasez de agua en el mundo, según el director de seguridad hídrica en América Latina de The Nature Conservancy, Hugo Contreras.
Las acciones gubernamentales quedan relegadas, según Contreras, a políticas orientadas a la construcción de infraestructura en lugar de reacondicionar las fuentes naturales de agua.
“El sector empresarial global está actuando antes que cualquier otro sector”, afirmó Contreras, al tiempo que reconoció que las grandes corporaciones “tienen intereses muy altos” y que disponen de la información y los medios suficientes para llevar a cabo las medidas.
Por su parte, los organismos políticos a nivel global están tratando de accionar mecanismos que alivien la situación, pero no disponen de los recursos suficientes.
“Los presupuestos públicos en México, en España, en el Perú (…) son menores a las necesidades”, explicó, entendiendo que los gobiernos tienen que establecer prioridades, pero entre ellas no entra el agua.
“Hay que asignar recursos para las necesidades apremiantes”, aseveró, refiriéndose a la sanidad o a la educación, entre otros.
Contreras calificó la situación del agua como “preocupante” a causa del crecimiento poblacional y económico de los últimos años, habiendo provocado un incremento masivo de la demanda.
“En los próximos 20 años se espera que la demanda supere a la oferta disponible al menos en un 40%”, afirmó.
Las acciones realizadas hasta ahora resultan erráticas, debido a una degradación y contaminación de las fuentes de agua.
“Hemos empezado a desarrollar actividades económicas y desarrollo urbano en sitios que son importantes para los servicios ecosistémicos ligados al agua”, explicó.
Expandir la línea urbana de las ciudades – que se está expandiendo a razón de varios cientos de hectáreas al año – elimina zonas de recarga tradicionales y esa agua que debiera almacenarse sigue corriendo en lugar de filtrarse, provocando inundaciones.
“Las ciudades se inundan porque ya no tenemos sitios naturales donde el agua se asiente”, recalcó.
El experto indicó que se ha “olvidado el ciclo del agua”, en el que es esencial la naturaleza, en la toma de decisiones.
Una empresa hidráulica tiene como prioridad el punto de toma, la planta de tratamiento o los pozos, pero Conteras afirmó que “hay todo un ecosistema” que hace posible la intervención humana y que se está obviando.
La cadena de valor del agua y cuán diferente es para un gobierno y para una empresa se ve reflejada en sus acciones.
En el caso de los gobiernos, el agua pública empieza en el punto donde puede obtenerla o distribuirla (presas, acueductos, etc).
“Para empresas como Pepsi o Coca-Cola, el valor comienza donde está su agua”, es decir, en la fuente natural.
“Son dos concepciones diferentes. Las empresas están más preocupadas, incorporan en su cadena de valor las fuentes de agua y las autoridades que gestionan el agua, no”, dijo.
Finalmente, para Contreras, todo se ve reducido a “un problema de gobernanza que hay que resolver” sustituyendo el paradigma actual, basado en la construcción, por uno que modere la demanda y cuide las fuentes.
Fuente: EFE