Xergio Córdoba patentó un sistema que se basa en la psicoacústica. (Foto: Facebook oficial)

Xergio Córdoba patentó un sistema que se basa en la psicoacústica. (Foto: Facebook oficial)

Síguenos en Facebook



Un ingeniero de mastering de España acaba de crear un sistema que cumplirá el sueño de muchos: poder escuchar música a todo volumen sin que los vecinos se den cuenta o se incomoden por eso.

Xergio Córdoba patentó un sistema que se basa en la psicoacústica para permitir que salas de conciertos o discotecas tripliquen su sonoridad manteniendo los mismos dBA. La tecnología masn’live hace que se pueda disfrutar de la música en su máxima calidad a pesar de las limitaciones acústicas legales.

===>>> Sigue a La Prensa en Facebook

Para desarrollarlo, el ingeniero se documentó y pasó largar horas de insomnio hasta lograr poner en funcionamiento su novedoso sistema.

“Básicamente sería que no gestiona el sonido tanto como una onda física sino como el cerebro lo interpreta. Es psicoacústica pura. Te pongo un ejemplo. Imagina que cuando te pones los auriculares de tu reproductor MP3 escuchas un bombo o un bajo, pero el auricular es muy pequeño para poder reproducirlo correctamente. Esto es por la compensación evolutiva. Es algo que usamos mucho en mastering y lo extrapolamos a nuestro sistema bajo los requisitos que necesitábamos llevar a cabo”, explicó en entrevista con Vice España.

Xergio Córdoba señaló que “sobre todo va dirigido a artistas que quieren que el público sienta más su mensaje musical. Si no hay problemas de sonido, o casi, podemos lograr auténticas maravillas. En Eternal Midnight (su empresa) vivimos del mastering de audio y con esto hacemos lo mismo que en el estudio pero en el local. Básicamente que todo suene mejor, además de más alto, nitidez, fuerza y detalle. Esto lo hemos hecho ya en múltiples ubicaciones con resultados bastante sorprendentes. Lo hemos puesto con blues, pop, salsa, rock, R&B”.

El sistema desarrollado por este ingeniero permitirá no arruinar una óptima experiencia musical al seguir las normativas de emisiones acústicas, que permiten niveles bajos de presión acústica y el sonido queda altamente deteriorado al restringir la emisión de frecuencias bajas.