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Estudiantes suizos han diseñado un robot que juega fútbol de mesa. Los muñecos de camisetas blancas son controlados por humanos y los rivales con casacas azules son manejados por robots. Hasta ahora son los robots los que están ganando. Y no es sorpresa que hasta ahora el equipo robotizado vaya ganando pues las máquinas son más rápidas, más poderosas y más precisas que cualquier ser humano. Ellas ven con la ayuda de una cámara que toma 300 imágenes por segundo.
Se ha colocado una cámara debajo de la mesa de fútbol y al ser el campo de juego transparente puede capturar todo el juego.
El robot utiliza motores usados en la manufactura. En el fútbol de mesa un motor posiciona a un jugador mientras que otro rota para disparar.
El objetivo de los desarrolladores del fútbol de mesa robotizado es duplicar el sistema para tener robots a ambos lados de la mesa, donde cada jugador desarrolle su propia estrategia y al final se tenga una competencia de estas dos estrategias.
