Síguenos en Facebook
Las relaciones entre Rusia y Estados Unidos “se están degradando”, volviéndose “cada vez peores”, ha afirmado el presidente ruso, Vladímir Putin , en una entrevista con el canal de televisión Mir.
En referencia a las tensiones comerciales actuales entre China y EE.UU., el mandatario ruso señaló que, “desde el punto de vista del sentido común”, Rusia no tiene “ninguna razón para interferir en las negociaciones” entre ambos países.
“Hay una disputa en curso entre las economías más grandes del planeta. Y hay muchas cuestiones específicas relacionadas con el trabajo actual de los dos estados”, recalcó Putin.
“Nuestra simpatía está del lado de nuestros socios estratégicos”
Al mismo tiempo, el jefe de Estado destacó las buenas relaciones que su país mantiene con China, país que calificó de socio estratégico “en todos los sentidos de la palabra”; tendencia que contrasta con las relaciones entre Rusia y Estados Unidos , que – dijo – están “cada vez peor”.
En los últimos años, Washington ha tomado “algunas decenas de decisiones relacionadas con sanciones respecto a Rusia”, se lamentó el presidente ruso.
“Por supuesto que, en estas condiciones, nuestra simpatía está del lado de nuestros socios estratégicos”, apuntó Putin.
De esta forma, el presidente ha aclarado su reciente broma sobre el lugar de Rusia en la guerra comercial, cuando en la sesión plenaria del 23.º Foro Económico Internacional de San Petersburgo señaló, citando “un buen dicho” chino, que “cuando los tigres pelean en el valle, el mono inteligente espera para ver cómo termina”.
“Al parecer, usted no prestó atención a cómo terminé. Dije que vivimos en un mundo complejo. Desde los tiempos en los que nacieron estos dichos, la situación ha cambiado seriamente”, subrayó Putin, recalcando que “hoy las relaciones entre Rusia y China son de particular importancia, tanto para nuestros países como para la comunidad mundial en general”.
La guerra comercial entre EE.UU. y China se ha intensificado desde principios de mayo, cuando Washington decidió aumentar los aranceles para una serie de mercancías chinas, importadas por el país norteamericano, con un valor de 200.000 millones de dólares al año. Por su parte, el gigante asiático contratacó anunciando la introducción, a partir del 1 de junio, de gravámenes a las importaciones de artículos estadounidenses por un valor de 60.000 millones de dólares.
Estados Unidos decidió además incluir en su lista negra comercial a Huawei, el gigante chino de las telecomunicaciones, y a 70 empresas afiliadas, al tiempo que amenaza a Pekín con imponer aranceles por otros 325.000 millones de dólares.
(Fuente: RT en español )