Síguenos en Facebook
Los presidentes ruso, Vladimir Putin, e iraní, Hasán Rohaní, acordaron hoy cooperar estrechamente para combatir la amenaza yihadista en países como Siria y Afganistán, en su primera cumbre trilateral con la vecina Azerbaiyán.
Vladimir Putin advirtió que organizaciones como Estado Islámico (EI, ISIS o Daesh) y el Frente de la Conquista del Levante (ex Frente al Nusra), que actúan en Siria e Irak, representan un “peligro real” para toda la región.
“Consideramos oportuno activar el intercambio de información sobre las actividades de las organizaciones terroristas internacionales”, subrayó el líder ruso durante la cumbre celebrada en Bakú, a orillas del mar Caspio.
Vladimir Putin destacó que esa es la única vía para “combatir de manera más eficaz el tránsito de guerrilleros, armas y drogas” y advirtió de que otros métodos unilaterales únicamente agravarán el problema del terrorismo.
Al término de la cumbre presidida por el líder azerbaiyano, Ilham Alíev, los tres mandatarios firmaron una declaración conjunta en la que condenan categóricamente el terrorismo en todas sus formas.
El comunicado llama a la comunidad internacional a “aunar esfuerzos” en la lucha “contra las amenazas a la estabilidad y seguridad internacional, con un papel coordinador central de la ONU”.
Al respecto, el ministro de Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, destacó la importancia de que el Consejo de Seguridad actualice “constantemente” la lista de organizaciones terroristas, ya que algunos grupos cambian de nombre, en alusión al Frente de la Conquista del Levante.
Además, el documento admite que “los conflictos latentes en la región son un importante obstáculo para la cooperación regional” y aboga por su “pronto arreglo” a través de negociaciones basadas en los principios del derecho internacional.
Por su parte, Rohaní *destacó que la cooperación entre Teherán y Moscú para el arreglo del conflicto sirio es un buen ejemplo de lo importante que son las relaciones entre ambos países e invitó a *Putin y Alíev a visitar Teherán para la próxima cumbre trilateral.
Rusia e Irán han insistido desde un principio en que el principal enemigo en Siria son los grupos yihadistas y no el régimen de Bachar al Asad, al que han apoyado con tropas y armamento.
Vladimir Putin ordenó el pasado año una intervención militar en el país árabe que ha ayudado a evitar el derrocamiento de Al Asad, al que Teherán apoya con fuerzas especiales y la guerrilla chiíta Hizbulá.
Esta cumbre tuvo lugar en la víspera de la reunión que mantendrán mañana martes Putin y el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, enemigo acérrimo de Al Asad y que ha apoyado desde el estallido del conflicto a la oposición armada siria.
Según informaron fuentes diplomáticas iraníes a la agencia oficial rusa RIA Nóvosti, Rohaní quiere proponer a Vladimir Putin ayudar a Erdogan en este momento de dificultad tras el fallido golpe militar en Turquía, aprovechando el enfriamiento de sus relaciones con Occidente.
Teherán considera que una alianza tripartita entre rusos, iraníes y turcos sería crucial para solucionar problemas regionales como los de Siria e Irak.
Mientras, Vladimir Putin está dispuesto a normalizar las relaciones con Turquía después de que Erdogan pidiera perdón por el derribo en noviembre de un cazabombardero ruso en la frontera siria, pero espera del líder turco “una postura más constructiva” en Siria.
Por otra parte, los tres países acordaron hoy tomar medidas para impulsar el corredor de transporte internacional “Norte-Sur”, de 7.200 kilómetros, que une el norte de Europa con la India y los países del golfo Pérsico a través de sus territorios.
En 2015 el volumen de transporte de mercancías a través de ese corredor ferroviario alcanzó los 7,3 millones de toneladas, destacó Putin, que calificó el proyecto de “prometedor”.
En el marco de ese corredor Azerbaiyán propone enlazar los tres países a través de una red ferroviaria, que uniría Teherán con San Petersburgo, vital tanto para el transporte de pasajeros como para el tránsito de mercancías.
Además, los tres dirigentes destacaron la importancia de una pronta aprobación de la convención sobre el estatus jurídico del mar Caspio, compartido por cinco países: Rusia, Azerbaiyán, Irán, Kazajistán y Turkmenistán.
“Estoy seguro de que la convención sobre el Caspio responde a los intereses de los cinco países”, dijo Vladimir Putin.
Esa convención es crucial para la explotación de los ingentes recursos naturales que acoge ese mar y para el tendido de oleoductos y gasoductos, indispensables para el suministro de los hidrocarburos de Asia Central a Europa.
En ese contexto, también expresaron en el comunicado su intención de cooperar en el intercambio de tecnología en materia de extracción y transporte de gas natural, ya que Irán y Rusia son las dos primeras potencias mundiales en reservas de gas.
Fuente: EFE