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“Qué tal, le dije, no conversamos nada. Le di dos (disparos) en el pecho y uno en la cabeza”. De esta forma, con sangre fría y sin ninguna muestra de arrepentimiento, el sicario Lindomar Hernández Jiménez, ‘Puerto Rico’, narró cómo asesinó por encargo al fotógrafo Luis Choy.
“El negocio vino de ‘cana’, se lo dieron a un tal ‘Pequeño’, no sé quién será, y él le dijo a Lucano. Él me contó que estaban pagando S/.20 mil por matar a un huev… Ya, yo le doy, loco, le dije”, contó el homicida, conocido en el hampa limeño como Jonathan Sepúlveda de los Santos.
Según relató en el interrogatorio, la persona que lo contactó, “un fortachón de baja estatura” lo citó en un centro comercial del Rímac para darle la foto de la víctima y S/.5 mil de adelanto. Ese mismo día, ‘Puerto Rico’ llamó al reportero gráfico, quien estaba vendiendo su camioneta, para encontrarse al día siguiente en su casa de Pueblo Libre.
“Un patita me llevó a la casa para ‘darle vuelta. Lo llamé, le dije que bajara, no conversamos nada. Le dije qué tal y ahí le di (…). Dos (disparos) en el pecho y uno en la cabeza”, relató de lo más tranquilo a los policías que lo interrogaron. El arma de fuego la compró en ‘La Cachina’.
Luego huyó en el el auto blanco que lo esperaba a una cuadra de la escena del crimen, botó las fotos en el río Rímac y fue a una casa en Comas. “Es la casa de la persona que me contactó, fui a cobrar el resto del dinero”, acotó. En tanto, la Policía está tras los pasos del nexo entre ‘Pequeño’ y el tal Lucano.
