Presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, aprobó un plan de paz para su país (EFE)

Presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, aprobó un plan de paz para su país (EFE)

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El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, anunció hoy la aprobación de un plan para desmovilizar bandas violentas, al tiempo que hizo “un llamado contra el odio” en el país, que ha registrado una escalada de violencia en los últimos días en medio de una ola de protestas antigubernamentales.

Durante un acto al término de una marcha de miles de chavistas en Caracas, el jefe de Estado explicó que el viceministro de Deporte, Alexander Vargas, le presentó este proyecto “de paz” para combatir la inseguridad ciudadana en el país caribeño, que registró una tasa de homicidios en 2016 de 70,1 por cada 100.000 habitantes, según la Fiscalía.

“Tiene luz verde para ir a un proceso de pacificación, de unificación de la juventud para el deporte, para el trabajo, para la cultura, para lo bueno”, anunció ante cientos de jóvenes en las cercanías del Palacio presidencial de Miraflores.

Maduro acusó a la oposición venezolana de haber “salido a corromper, a violar, a romper, a quemar” durante los últimos días en los que al menos 29 personas han perdido la vida, producto de hechos violentos desatados en escenarios de protestas.

“Mientras ellos buscan la destrucción y la muerte a través de la violencia, nosotros buscamos la vida a través de la cultura, de la alegría, de la poesía, de la educación, del arte, de la salsa”, sostuvo.

Por ello, el mandatario pidió a sus simpatizantes llamar al trabajo a los opositores.

“Tenemos que hacer un llamado contra el odio, ellos quieren llenarnos de odio para llevarnos a una situación de escalada de violencia, una escalada de violencia a través del odio”, agregó.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) considera que existe una “epidemia” de violencia en un territorio cuando se registran tasas de más de 10 homicidios por cada 100.000 habitantes.

De las muertes en Venezuela, el 86,6 % fue causado en 2016 por armas de fuego, por lo que, según la fiscal general, Luisa Ortega Díaz, “es imperativo el desarme de la población civil”.

EFE