El Gobierno de Nicolás Maduro consideró las palabas de Obama como una "nueva y grosera injerencia". (Foto: chavezcandanga/Flickr)

El Gobierno de Nicolás Maduro consideró las palabas de Obama como una "nueva y grosera injerencia". (Foto: chavezcandanga/Flickr)

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El Gobierno de Venezuela consideró que la opinión del presidente de Estados Unidos, Barack Obama, sobre la crisis en el país llanero constituye una “nueva y grosera injerencia” en su política interna.

“Venezuela repudia tajantemente las declaraciones emitidas del presidente de los Estados Unidos, Barack Obama, en la medida en que constituyen una nueva y grosera injerencia en los asuntos internos de nuestro país, con el agravante de usar como base información falsa y aseveraciones sin fundamento”, indicó la cancillería en un comunicado.

El jefe del Estado de EE. UU. consideró inaceptable la violencia de la policía contra los manifestantes. “(Llamo) Al Gobierno de Venezuela para que libere a los manifestantes detenidos y a entablar un diálogo verdadero”, expresó desde México.

“En Venezuela, en lugar de tratar de desviar la atención de sus propias carencias y expulsar con acusaciones falsas a diplomáticos estadounidenses, el Gobierno debería concentrarse en atender los reclamos legítimos del pueblo venezolano”, agregó Obama.

El martes, Maduro dijo que “la ultraderecha de Miami y Venezuela” ha elaborado un plan para asesinar a López y precipitar una crisis política mayor en el país. “Nosotros salvamos su vida”, refirió el jefe del Estado. Las autoridades descartaron que el proceso contra el líder opositor tenga cariz político.