El Gobierno indicó que algunos de los extranjeros capturados pertenecían a servicios de inteligencia. (Marco Hernández/Flickr)

El Gobierno indicó que algunos de los extranjeros capturados pertenecían a servicios de inteligencia. (Marco Hernández/Flickr)

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El Gobierno venezolano aseguró el domingo que parte de los 58 extranjeros detenidos en relación con las manifestaciones de protesta en ese país tienen nexos con la oposición.

El ministro de Relaciones Interiores, Miguel Rodríguez Torres, indicó en una entrevista con un canal de televisión estatal que algunos de esos extranjeros “viven en Venezuela, pero tienen conexiones con algunos servicios de inteligencia extranjeros”.

Durante la entrevista, Rodríguez Torres mencionó nuevamente al periodista venezolano, co-fundador de Globovisión y director actual de Lapatilla, Alberto Ravell, entre los posibles involucrados, sustentándose en una fotografía en la que se le observa con Gustavo Tovar, uno de los supuestos actores del “plan insurreccional” contra Venezuela.

Otro de los extranjeros presuntamente involucrados es el estadounidense Todd Michael Leininger, quien, según Torres, fue capturado en la ciudad suroccidental de San Cristóbal con dos pistolas, dos fusiles de asalto y uniformes militares y agregó que también se le incautó un pasaporte estadounidense y una insignia de una “supuesta justicia norteamericana”.

El ministro Rodríguez Torres también identificó por nombre a Luis Enrique Liscano Villamizar, supuestamente exmilitar colombiano, al que acusó de ser “asesor de las guarimbas (los bloqueos) en el estado del Zulia.

El funcionario agregó que entre los extranjeros “hay opositores que tienen una vinculación con Leopoldo López y en la guarimba hemos venido descubriendo relaciones de dirigentes de la oposición con estos hechos, uno de ellos es (el alcalde de Caracas, Antonio) Ledezma”.

“Indudablemente aquí en Venezuela hay conspiradores que se han dedicado a esta actividad (…) No lo digo con intenciones de poner en peligro la mesa de diálogo, pero es necesario que estas cosas se discutan”, añadió.

La oposición desestimó las denuncias, asegurando que forman parte de una estrategia del oficialismo para distraer la atención de los venezolanos de los problemas graves que padece el país.

Fuente: Voz de América.