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En Perú la donación de órganos es aún escasa. Según cifras de EsSalud, en el país existen más de 7 mil pacientes que están a la espera de una donación de órganos y tejidos. A su vez, de acuerdo a la Reniec, solo el 13% de personas ha precisado que sí desea ser donante en su DNI. En el marco del Día Internacional del Trasplante de órganos y tejidos (27 de febrero) hablaremos de uno de los más solicitados: el de córnea.
Este trasplante consiste en una cirugía en la que se cambia algunas o todas las capas de la córnea, según el caso y la necesidad, por las de un donante. El objetivo de esta operación es devolver la trasparencia de esta capa o la regularidad de su superficie.
Según explica el Dr. Rubén Berrospi Salcedo, especialista de Oftálmica Clínica de la Visión, actualmente existen dos tipos de trasplante de córnea: el trasplante total o también llamado penetrante y el trasplante de alguna de las capas, el cual es denominado lamelar.
El primer tipo puede ser con fines visuales (como cuando hay una cicatriz en la córnea) o no visuales (en el caso de una úlcera corneal que no responda al tratamiento). Mientras que el trasplante lamelar, casi siempre es con fines visuales ya que se cambian las capas anteriores o posteriores de la córnea con el objetivo de mejorar o preservar la transparencia y/o curvatura de la córnea.
¿En qué ocasiones es necesario el trasplante?
El médico oftalmólogo indica que las más frecuentes causas del trasplante de córne o queratoplastia son las siguientes enfermedades o complicaciones:
1. Queratopatía bullosa post pseudofaquia: Se trata de una descompensación de la córnea, luego de la operación de catarata. Se puede presentar una falla en el endotelio corneal luego de la cirugía así como también puede ser luego de meses o años. Inicialmente se puede pensar en un trasplante lamelar posterior (endotelial) pero si pasa mucho tiempo, las demás capas de la córnea se afectan obligando a realizar un trasplante penetrante (todas las capas).
2. Queratocono: Es un problema progresivo de la córnea que se caracteriza por una disminución en el grosor de este tejido así como un aumento en la curvatura la cual puede llevar a la aparición de un astigmatismo irregular. En los casos en donde el paciente presenta esta patología en un grado avanzado, se puede llegar a realizar un trasplante lamelar anterior (DALK) o un trasplante penetrante.
3. Trauma oculares: Son las distintas contusiones o accidentes que pueden lastimar los ojos y como consecuencia generar complicaciones en la visión, desde inflamaciones hasta rupturas de los tejidos como lo es la córnea. Cuando hay una herida corneal esta se asocia con frecuencia a infecciones las cuales así tengan un buen tratamiento dejan cicatrices. Dependiendo de la gravedad del trauma o de la severidad de las complicaciones se determinará el tipo de trasplante a realizar.
4. Distrofia corneales: Una de las más frecuentes es la distrofia endotelial de Fuchs, un mal que afecta casi siempre ambos ojos y tiene un componente genético por lo que es progresivo (y por lo mismo requiere valoraciones periódicas). Cuando esta enfermedad se encuentra avanzada, manifiesta síntomas de disminución visual o significa un riesgo muy alto para una cirugía de catarata siendo necesario realizar un trasplante lamelar posterior (endotelial).
Tratamiento
Ante problemas en el endotelio corneal se recomienda realizar un procedimiento llamado DMEK (Queratoplastia Endotelial de Membrana de Descemet), un tipo de trasplante lamelar que se realiza a través de una pequeña incisión y no necesita puntos, haciendo que su recuperación sea corta. Durante esta intervención, uno de los pasos más críticos es identificar la correcta orientación del tejido a colocar, pues se puede desplazar o girar durante la inserción.
Por ello, el Dr. Rubén Berrospi Salcedo ha descrito una técnica no invasiva denominada “Signo de Berrospi”, la cual es capaz de corroborar la correcta orientación de este endotelio, proporcionando la información de manera instantánea. Este aporte, brinda una confirmación efectiva y rápida de la adecuada posición del tejido. Asimismo, al ser no invasiva, este signo evita generar algún trauma o lesión en el endotelio pues no introduce instrumentos en la visión.
Importancia de la donación
De acuerdo al Estudio de la Percepción de la Calidad de Vida y Salud Ocular de los Limeños, de Oftálmica Clínica de la Visión, un 54% de limeños estaría dispuesto a donar su córnea. “El hecho que el familiar fallecido done su córnea no implica algún desfiguramiento, la persona se ve anatómicamente igual. El tejido corneal es privilegiado ya que no tiene necesidad de generar alguna compatibilidad entre el donante y el receptor, lo cual significa que todos somos potenciales donantes para cualquier otra persona. Es importante crear la conciencia entre la población y generar una cultura de donación”, puntualizó el especialista.
En el caso del trasplante de córnea, actualmente hay más de 6 mil pacientes a la espera de este tejido.
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