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El Gobierno de Suiza tendrá que pagar una indemnización de 6.000 euros al ciudadano peruano Carlos Ruiz Rivera, de 58 años, por los 13 años de cárcel que purgó por decapitar a su esposa, debido a que sufría de esquizofrenia y debió ser internado en un hospital psiquiátrico.
El Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH) resolvió, por cuatro votos contra cinco, que se vulneró el Convenio Europeo de Derechos Humanos sobre la facultad del detenido a presentar un recurso sobre la legalidad de su encarcelamiento.
En 1995, Ruiz mató a la mujer de 49 puñaladas, le cortó la cabeza y arrojó el cuerpo por la ventana del edificio donde vivían en Zúrich. El homicida había consumido alcohol y cocaína.
En 2001, un informe psiquiátrico confirmó la enfermedad mental de Ruiz, encontrada en un examen seis años atrás. Otro informe en 2004 corroboró su situación. En 2008 se determinó que el reo se encontraba en un “estado de necesidad psicótica”.
Luego, fue puesto en libertad provisional en 2009 y expulsado a Perú, donde reside en la ciudad de Cuzco. “Los informes de 2001 y 2004 no eran lo suficientemente recientes para permitir apreciar la personalidad y el grado de madurez del demandante”, observa el tribunal.
Ruiz Rivera había solicitado una indemnización de cerca de 900.000 euros por daños morales y materiales. Los magistrados resolvieron que la decisión “constituye en sí misma una indemnización por todo daño moral sufrido”.
La sentencia es provisional, ya que Suiza solicitaría la revisión del caso por parte de la Gran Sala del Tribunal de Estrasburgo.