Luis Fernando Figari permanece en el Vaticano por orden de la Iglesia católica. (Foto: USI)
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En un informe público, el Sodalicio de Vida Cristiana reconoció que ocho de sus líderes, entre los que se cuenta a Luis Fernando Figari, abusaron de al menos 36 integrantes, 19 de ellos menores de edad cuando sufrieron las agresiones, entre 1974 y 2002.
Luego de que la fiscalía archivara el caso y el Vaticano decidiera que el principal investigado permanezca en Roma, la congregación católica hizo un mea culpa parcial. ¿Quiénes son los otros sindicados?
El fallecido Germán Doig, Virgilio Levagg*i, actual funcionario de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), y *Jeffrey Daniels, quienes “ya no mantienen vínculos con la organización.
Días atrás, el superior general del Sodalicio, Alessandro Moroni, indicó que estos abusaron de 19 menores y 10 adultos. Sin embargo, las identidades de los otros cuatro agresores no han sido reveladas. Se les acusa de abusos sexuales de siete adultos entre 1996 y 2002.
De la investigación interna se encargaron el irlandés Ian Elliot, experto en asistencia a víctimas; y las estadounidenses Kathleen Mc Chesney, exintegrante del FBI, y Mónica Applewhite, especialista en prevención de abusos. La comisión interrogó a 245 personas, testigos y víctimas de abusos.
LO QUE DICE INFORME
“Figari usó su posición de liderazgo para tener un control y dirección autoritaria sobre la mayoría de los sodálites. Era la persona más poderosa en la organización y muchos creían que sus palabras y directrices provenían directamente de Dios”, refiere el documento en el que se señala a Luis Fernando Figari de haber abusado de siete sodálites.
Mientras que Doig, quien iba a ser canonizado, abusó de cinco varones y una mujer menores de edad entre 1983 y 2000. Levaggi agredió sexualmente a un menor y dos adultos entre 1977 y 1987. Y Daniels abusó de doce varones menores entre 1985 y 1997.
La fiscal María del Pilar Peralta había archivado la investigación al Sodalicio. Las críticas llegaron desde la sociedad civil y el Gobierno. La ministra de la Mujer y Poblaciones Vulnerables, Ana María Romero-Lozada, pidió al Ministerio Público que se reabra el caso.
En las próximas semanas, el fiscal superior Frank Almanza, quien investigó de forma impecable a la familia Sánchez Paredes, decidirá si reabre el expediente.
En respuesta, Armando Lengua Balbi, abogado del fundador del Sodalicio, Luis Fernando Figari, evalúa denunciar a la organización por “daños y afectaciones”, de acuerdo a El Comercio.
