Imagen referencial. (Foto: Wikimedia)
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Un padre de familia llegó hasta un extremo insospechado para complacer a su hija de doce años, que deseaba jugar con serpientes por su cumpleaños.
El británico Daniel Orton hurtó dos boas constrictoras de un parque temático escondiéndolas en una mochila el pasado julio. No contento con eso, robó otras cinco serpientes más pequeñas colocándolas en una caja y luego las llevó hasta su auto, donde la menor jugó con los animales hasta que el delito fue detectado.
“Parecía que querían escaparse”, fue la excusa de Orton cuando un empleado del lugar observó su conducta sospechosa y lo siguió hasta su vehículo.
Luego de varios meses de seguir la causa, los magistrados de la localidad británica de Notts, en el condado de Nottingham, dispusieron que el peculiar padre pague 610 libras esterlinas por daños y perjuicios al parque.
Por su parte, la abogada defensora de Orton logró evitar la cárcel para su cliente alegando que este sufrió “un momento de locura”, según informa Mirror .
“Fue un regalo de cumpleaños para su hija. Él dijo que tomó las dos boas constrictoras de un vivero, pero que eran muy pequeñas en ese momento”, relató.
