Ban Ki-moon, secretario general de la ONU (Getty Images)

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El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, condenó la reciente ejecución de 47 personas en Arabia Saudí, incluida la del clérigo chií Nimr Baqir al Nimr, y pidió calma para evitar un resurgimiento de las tensiones sectarios en Medio Oriente.

En un comunicado, la ONU indicó que Ban Ki-moon se encuentra “profundamente consternado” por las ejecuciones realizadas en el territorio árabe.

“Al Nimr y otros de los prisioneros ejecutados fueron condenados después de juicios en los que hubo serias dudas sobre la naturaleza de los cargos y la imparcialidad del proceso”, añadió el secretario general en el mismo comunicado.

Tras recordar que abordó el caso del clérigo chií opositor en repetidas ocasiones con los líderes saudíes, Ban Ki-moon reiteró su “firme oposición” a las ejecuciones y urgió a las autoridades de ese país a conmutar la totalidad de sentencias a pena de muerte.

Finalmente, llamó a la calma y la moderación en la respuesta a las ejecuciones, urgió a los líderes regionales a trabajar para prevenir una “exacerbación” de las tensiones sectarias y lamentó los actos de violencia frente a la embajada saudí en Teherán.

El clérigo Nimr Baqir al Nimr fue apresado en 2012 por apoyar a grupos terroristas en Al Qatif, de mayoría chií, y su sentencia a muerte fue confirmada en octubre pasado por el Tribunal Supremo.

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