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El Ministerio de Cultura expresó su indignación por los hechos ocurridos en la zona colindante a la figura del colibrí de las Líneas de Nasca, donde activistas de la organización Greenpeace desplegaron en letras gigantes amarillas la frase “Tiempo de cambio: el futuro es renovable”, con motivo del desarrollo de la cumbre COP20 sobre el cambio climático.
Según indicó el portafolio que dirige Ana Álvarez-Calderón, la acción “ilegal, inconsulta y premeditada” del grupo ambientalista causó una “grave afectación” en el área vulnerada.
ENLACE: Peruanos critican a Greenpeace por daños en Líneas de Nasca
Las Líneas de Nasca, al ser consideradas Patrimonio Cultural de la Humanidad, es un área donde está estrictamente prohibido cualquier tipo de intervención, debido a la fragilidad del área que rodea a las figuras.
El sector Cultura denunció los hechos ante la fiscalía de Nasca y solicitó que se dicte el impedimento de salida del país de los responsables. Asimismo, exhortó a la población a colaborar con la identificación de las personas que cometieron lo que considera un “atentado” contra el patrimonio cultural de todos los peruanos.
“El Perú es respetuoso de la libertad de expresión, siempre que no se atente contra el patrimonio del país o se cometa cualquier otro acto que vulnere la ley”, señala el comunicado.