El Gobierno mexicano ha elaborado un plan para encarar la obesidad y la diabetes. (Foto: USI)
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En un intento por aumentar los ingresos por recaudación tributaria y enfrentar un creciente problema de obesidad entre su población adulta, el Congreso de México aprobó un nuevo impuesto a la comida chatarra y las bebidas gaseosas.
La medida se debe a que México sobrepasó a Estados Unidos como el país con la más alta incidencia de obesidad entre los adultos, según informó la cadena BBC Mundo.
Los nuevos gravámenes son parte de una reforma tributaria más amplia propuesta por el presidente Enrique Peña Nieto. El anuncio coincide con el lanzamiento de una nueva estrategia gubernamental para encarar la obesidad y la diabetes.
A criterio de quienes se oponen a esta disposición, los impuestos más altos podrían perjudicar el crecimiento económico del país. La reforma tributaria es una de las principales metas del Gobierno mexicano.
