ISIS: desplazados buscan nuevo refugio en medio de la batalla de Mosul

Los desplazados iraquíes de localidades liberadas del control del grupo yihadista Estado Islámico (EI, ISIS o Daesh) en torno a Mosul, como Bazuaia, se enfrentan ahora a la incertidumbre de dónde vivirán hasta que sus poblaciones recuperen la normalidad y puedan regresar a ellas.

Tras ser liberada ayer por las fuerzas iraquíes, el paisaje que inunda hoy la localidad de Bazuaia es desolador: casas y negocios incendiados, neumáticos quemados en la mediana de la carretera y ni un alma deambulando por las calles de esta urbe, situada a escasos kilómetros de Mosul.

De fondo, se escuchan los disparos de los francotiradores de ISIS que intentan resistir la ofensiva de las fuerzas iraquíes, que ya han conseguido entrar en la parte oriental de Mosul.

En las afueras de Bazuaia, las tropas iraquíes, junto a las kurdas o peshmergas, escoltan un convoy de 52 familias (cerca de 250 personas) que han huido de la localidad, para reubicarlos en otros lugares.

Algunas de esas personas, como Basem, de 26 años, recuerda cómo fue su vida durante los dos años y medio que su ciudad estuvo bajo el yugo de ISIS.

“Era un infierno, vivíamos bajo condiciones terribles. Vendíamos todo, nuestra ropa, todo, para comprar algo de comida. Y nos torturaban sin ninguna razón, simplemente porque te afeitabas la barba o llevabas pantalones cortos. Era una situación horrible”.

La desesperación de este joven casado y con tres hijos llegó a su punto máximo hace tres días, en mitad de la ofensiva de las fuerzas iraquíes para liberar su hogar de los extremistas.

“Ya no había comida ni para nosotros ni para nuestros animales, así que decidimos salir para buscar comida. Esperamos que el Ejército iraquí nos dé algo”, suspira este antiguo mecánico, hoy desempleado.

En el asiento del conductor y con toda la familia metida dentro del coche, Basem reconoce que aún no saben dónde ir, aunque espera encontrar un refugio en el vecino campamento de desplazados de Al Jazer.

A su lado, otro hombre de 50 años, que prefiere mantenerse en el anonimato, rememora que la batalla entre las tropas iraquíes y los extremistas “fue muy dura, ya que Daesh opuso mucha resistencia”.

Pese a ello, “el ejército iraquí hizo muy buen trabajo y liberó la ciudad”.

“Aún así, decidimos marchar por si pasaba algo e ir a Erbil para juntarnos con nuestras familias”, agrega.

Por la misma carretera en la que esperan estos desplazados, circulan camiones de las fuerzas iraquíes en dirección a Mosul, con el objetivo de reforzar a las tropas que se enfrentan duramente a los yihadistas.

Como muestra de la dura resistencia que se están encontrando, varias ambulancias hacen el camino contrario, salen de Mosul y pasan por Bazuaia a toda velocidad cargadas de soldados heridos.

Esta ofensiva, presente desde el pasado *17 de octubre, está provocando que la situación de estas 52 familias sea más que común en el país.

Según un informe publicado hoy por la Oficina de Naciones Unidas de Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA), los combates por recuperar Mosul han causado casi 18.000 desplazados que necesitan ayuda humanitaria.

En las áreas recién liberadas, como Bazuaia, “la prioridad es la comida”, agrega en el documento la OCHA, ya que “la gente ha estado subsistiendo gracias a una dieta de pan y agua”.

Asimismo, alerta de una fuerte contaminación en la zona debido, en gran parte, a la quema de pozos de petróleo por parte de los yihadistas.

Además, también sostiene que tanto esa contaminación como los explosivos que quedan en las localidades liberadas, “están causando víctimas civiles en las áreas recién recuperadas”.

Según la OCHA, se ha atendido a más de 25.000 desplazados en las últimas 48 horas con ayuda humanitaria de emergencia, muchos de ellos, en esas zonas recientemente liberadas.

La gran ofensiva para arrebatar Mosul a ISIS comenzó el pasado día 17 de octubre y desde entonces las fuerzas iraquíes, junto a las kurdas “peshmergas”, han ido avanzando sin pausa, por los frentes este, norte y sur.

Estado Islámico conquistó Mosul en junio de 2014, cuando también autoproclamó un califato en los territorios bajo su control de Irak y de la vecina Siria.

Fuente: EFE