Ramos Heredia afirmó que no tenía el poder de mover fiscales. (Foto: Cortesía Agencia Andina)
Síguenos en Facebook
Dos investigaciones de ofició contra el fiscal de la Nación, Carlos Ramos Heredia, abrió el Consejo Nacional de la Magistratura (CNM) sobre su participación en la indagación del caso ‘La Centralita’ y por no haber sancionado la presunta inconducta funcional de una fiscal en el caso Sánchez Paredes.
En la primera resolución se le imputa haber incurrido en inconducta funcional, en su calidad de fiscal supremo de Control Interno, por presuntas irregularidades en la investigación seguida a los exfiscales a cargo de recabar información sobre el local desde el que se habría espiado a rivales políticos del presidente regional de Áncash, César Álvarez.
ENLACE: 10 frases de Carlos Ramos Heredia tras jurar como nuevo fiscal de la Nación
La investigación culminó con un informe a favor de la formalización y continuación de una investigación preparatoria contra los exfiscales por la presunta comisión del delito contra la administración pública, modalidad de abuso de autoridad, en agravio del congresista Heriberto Benítez y el Estado, indica Andina.
Asimismo, una segunda resolución, de acuerdo al CNM, considera investigarlo por no haber sancionado la inconducta funcional en que supuestamente habría incurrido la fiscal María Maguiña Torres en el proceso penal contra Orlando Sánchez Paredes y otros investigados por presunto lavado de activos provenientes del narcotráfico.
Las investigaciones del CNM en ambos casos apuntan a determinar si Ramos Heredia incurrió o no en una falta disciplinaria. El titular del Ministerio Público tiene un plazo de 10 días, a partir del día siguiente de la notificación de las resoluciones, para que presente su descargo por escrito.
ENLACE: Ramos Heredia asegura que no tiene influencias para destituir fiscales
Ramos Heredia ha afirmado que no tenía facultad para cambiar a fiscales, en respuesta a las acusaciones que lo sindican de haber movido influencias para retirar a los magistrados incómodos para el presidente regional César Álvarez y que investigaban presuntos casos de corrupción.
