Los grilletes electrónicos empezarán a ser aplicados desde el próximo año. (Foto: Andina)

Los grilletes electrónicos empezarán a ser aplicados desde el próximo año. (Foto: Andina)

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A fin de año se lanzará el concurso público que definirá a la empresa privada que ofrecerá los grilletes electrónicos para sentenciados a arresto domiciliario, con lo que se descongestionarán las cárceles, y recién el próximo año se estarán aplicando, informó el jefe del INPE, José Luis Pérez Guadalupe.

El funcionario indicó que una empresa privada ya hizo una propuesta respectiva a Proinversión y, como se trata de un concurso, se espera que otras empresas se presenten con propuestas similares (hasta el momento lo han hecho dos) y compitan entre sí.

“Tiene que verse la capacidad y cantidad de grilletes que ofrece cada grupo, teniendo en cuenta que el máximo con el que vamos a contar son 5.000 grilletes. Debemos saber también a qué costo se hará. La que ofrezca mayores aspectos, ganará el concurso”, dijo en diálogo con Andina.

Sostuvo que el próximo año se hará la aplicación de este sistema y, que por ahora, se sigue analizando en qué casos se obligaría a usarlos. “Los que sean condenados a menos de siete años podrían acceder, siempre y cuando cumplan otros aspectos como buena conducta, aunque eso está siendo analizado”.

También podrían usarlo quienes ya están dentro de la cárcel pero, con el paso de los años, buscan salir y cambiar su situación a comparecencia con grilletes; o para los reos que reciben beneficios penitenciarios.

Tras manifestar que los jueces deben tener diferentes alternativas en el momento que dicten la sentencia, Pérez Guadalupe subrayó que el único objetivo es lograr el descongestionamiento de las cárceles.

Canje de penales
Sobre el canje de penales, otro proyecto que se está trabajando con Proinversión, indicó que este año se trabajará la propuesta del penal San Jorge, ubicado en el Centro de Lima.

Este proceso consiste en que una empresa privada compra el terreno donde está ubicado el penal y construye, por ejemplo, un centro comercial, pero a cambio edifica un nuevo penal, más amplio y con mejor infraestructura, en una zona ubicada a un máximo de 45 minutos de la ciudad.

“Lo de San Jorge ya es definitivo, pero con los otros penales estamos evaluando si conviene esa modalidad o venderlos simplemente, y construir nosotros aparte otro penal”, refirió.

Este proceso involucra a los penales Lurigancho, Castro Castro, Chorrillos y Quencoro (en Cusco) que se encuentran en evaluación.

En el caso de Chorrillos, anotó, son dos hectáreas en una avenida importante y podría ser atractivo para la inversión privada, mientras que en el caso del penal de Quencoro, que tiene 13 hectáreas, podría construirse allí la sede del gobierno regional, que actualmente ocupa un espacio alquilado.