El tsunami cobró la vida de más de 200.000 personas el 26 de diciembre de 2004. (Foto: Australia Government / Flickr)
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Una niña a la que se había dado por muerta tras el devastador tsunami que arrasó Indonesia en diciembre de 2004, fue hallada por sus padres diez años después, informan los medios locales .
Raudhatul Jannah, quien en 2004 tenía cuatro años, fue arrastrada junto a su hermano por el tsunami en la provincia de Aceh, en Sumatra, precisó la agencia DPA. Sus padres intentaron retener a los niños pero fue imposible debido a la fuerza del mar, que ese día cobró la vida de más de 200.000 personas.
Si bien los padres siguieron buscando a los niños, finalmente los dieron por muertos.
Ello hasta un tío vio a una joven que se parecía a la pequeña Raudhatul y tras una investigación se confirmó que la menor era una sobreviviente del tsunami, considerada huérfana.
“Es un milagro de Dios”, afirmó la madre, quien aseguró haber reconocido de inmediato a su hija el miércoles pasado. “Mi marido y yo estamos felices de haberla encontrado”, agregó la mujer visiblemente emocionada.
Se supo que la ahora adolescente fue cuidada durante todo este tiempo por una mujer mayor de la provincia de Barat Daya. Raudhatul también está convencida que su hermano, Arif Pratama, quien tenía siete años cuando el tsunami devastó Sumatra, también se encuentra con vida.
“He escuchado que vive en las islas Banyak, pero no sé en qué pueblo”, indicó la menor, cuya madre adelantó que lo buscarán en esa región.
Por su parte, Raudhatul dijo sentirse feliz de reunirse con sus padres de nuevo. Asimismo, sostuvo que no recuerda lo que sucedió cuando fueron arrastrados por el mar.
Su padre Septi Rangkuti narró que sujetaba a Raudhatul y corrió hacia el pequeño Arif, cuando una enorme ola los envolvió. Encontró un lugar en donde poner a sus hijos, sin embargo, una nueva ola los atrapó y los perdió.
La mujer que cuidó a Raudhatul declaró que su nuero encontró a la menor que había sido rescatada por pescadores en las islas Banyak, a unos 200 kilíometros de Aceh. “No sabía que sus padres seguían vivos, pero estoy feliz que se haya reunido con su familia”, agregó.
