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El excoordinador de la Confluencia por Lima y exfundador del Movimiento Tierra y Libertad, Marco Zevallos Bueno, acusó a personajes como Marco Arana, Marisa Glave y Pedro Francke de ser “sectarios”.

“La dirección nacional de Tierra y Libertad intervino a la dirección de Lima metropolitana y a nivel de la Confluencia conversó con las dirigencias nacionales de todos los otros partidos. Lo hizo para retrotraer todo lo que habíamos logrado en el cuarto encuentro de la Confluencia, de tener una apertura de ancha base. Primaron otro tipo de intereses, se intervino y se convocó a una nueva asamblea en la cual se dijo que debían primar los vetos que desde la dirección nacional existían”, indicó.

En diálogo con Buenas noches, el revocado regidor capitalino acusó a la dirigencia nacional de Tierra y Libertad de haber rechazado cualquier posibilidad de acuerdo con varias opciones políticas con miras a las elecciones del domingo último.

“Se vetó al Partido Humanista, a Alianza para el Progreso, a Perú Posible, al Partido Nacionalista”, explicó.

No obstante, según el también expersonero de Fuerza Social éste no sería el único problema al interior de esta organización política.

“Se estaba viendo un proceso de degradación institucional del partido. Había intervencionismo desde la dirección nacional en los espacios regionales. A Lima no le permitieron que pudiera plantear la política de alianzas para enfrentar su realidad regional, se intervino distintos comités señalando que cualquiera podía entrar (…) Esto hacía que quien tuviera mayor nivel de exposición pública tuviera un nivel de representación en futuras representaciones congresales”, detalló.

“Al final lo que ha habido es una lógica bien sectaria, no solamente de Marco Arana, sino aquí hay que comprender a a la dirección nacional. Nombres como el de Pedro Francke, la propia Marisa Glave, Carlos Monge. Ellos han tenido una participación activa en esta situación”, criticó.

El Frente Amplio no es muy amplio
Por último, Zevallos Bueno consideró algo contradictorio que el Frente Amplio termine por “no ser tan amplio” y cerrarle el espacio a quienes no son necesariamente de izquierda.

“Ahora lo que se está planteando es esta figura del Frente Amplio de Izquierda, lo cual es un contrasentido. Si es un frente que se circunscribe a la izquierda… ¿no es muy amplio no?”, añadió.

“Había quienes entendíamos que, por ejemplo, para enfrentar una realidad como la de Lima metropolitana eso no bastaba. No puedes enfrentar una realidad como la de Lima si te circunscribes a la izquierda”, cuestionó.

Por lo mismo, Zevallos denunció que Tierra y Libertad prefirió preservar y beneficiar su nombre y no la gestión de la alcaldesa de Lima, quien finalmente se quedó solo con tres regidores en el Concejo.

“Eso evidenció que no les interesó defender a la gestión de Susana Villarán, sino posicionar el partido”, concluyó.