(Foto: USI)

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En el ojo de la tormenta. Así se encuentra actualmente el alcalde de San Juan de Lurigancho, Carlos Burgos Horna, luego de que el despacho del fiscal de la Nación, José Peláez Bardales, encontrara indicios de un presunto desbalance patrimonial en sus bienes.

Según informó RPP Noticias, la fiscalía detectó operaciones y transacciones bancarias por parte de la autoridad edil y de su teniente alcalde, David Nestares Silva, que no guardan relación con los ingresos que perciben.

También se determinó un incremento patrimonial injustificado en el caso de Jessica Karina Oviedo Alcázar, exasesora y colaboradora cercana de Burgos Horna.

Peláez Bardales remitió el informe con estas conclusiones a la mesa de partes de las fiscalías especializadas en delitos de corrupción de funcionarios, a fin de que formalicen el inicio de una investigación preparatoria contra los involucrados.

Los cuestionamientos en contra de Burgos por supuestos actos de corrupción han sido constantes en los últimos meses.

A inicios de noviembre, el dominical Cuarto Poder denunció que el helicóptero adquirido por la Municipalidad de San Juan de Lurigancho no vuela, y que la empresa que lo vendió fue la misma que inició el estudio de factibilidad para su compra.