(Video: youtube.com/actualidadrt

Síguenos en Facebook



El presidente de Bolivia, Evo Morales, partió hoy de Europa hacia su país tras estar varado unas 13 horas en Viena, Austria, debido a una crisis diplomática causada por la negativa de España, Italia, Portugal y Francia para que la aeronave del mandatario sobrevolara sus territorios por la sospecha de que transportaba al extécnico de la CIA Edward Snowden, buscado por EEUU por filtrar secretos de su programa de espionaje.

Antes de partir de Viena, Morales negó la presencia de Snowden en la aeronave: “¿Cómo podemos tener en el avión a una persona que tiene problemas con su país? Es un problema de Estados Unidos, no es un problema de Bolivia y latinoamericano”.

Morales regresaba de una cumbre en Rusia y el avión donde viajaba tenía previsto realizar una escala para abastecimiento de combustible en las Islas Canarias (propiedad española) antes de volar a territorio sudamericano. Luego de la negativa, el mandatario declinó volver a Moscú para que no pareciera que estaban devolviendo a Snowden, quien previamente había solicitado asilo al país altiplánico junto a otras 20 naciones.

El jefe del Estado relató que una vez en Austria, el embajador de España en Viena pidió tomar un café dentro del avión con la presunta intención de revisar el interior, pero que esta acción le está prohibida por normas internacionales. Agregó que los presidentes deberían tener el derecho de viajar a cualquier lugar del mundo y aseguró que el impasse fue una ofensa contra el país y toda la región latinoamericana, informó BBC News.

El Congreso de Bolivia acusó a Estados Unidos de ordenar a Europa paralizar el vuelo de Morales y calificó el acto de “agresión”, pero Francia, Portugal y España, principales implicados, negaron el bloqueo. Además, la Organización de Estados Americanos (OEA) rechazó la actitud de estos países europeos.