Relotius escribió cerca de 60 textos para la revista desde 2011 y en al menos 14 de ellos recurrió a las manipulaciones que ahora se le imputan. (Foto: EFE)
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Berlín. El embajador de USA en Alemania, Richard Grenell, ha instado al semanario “Der Spiegel” a dar explicaciones tras revelarse que el periodista Claas Relotius publicó reportajes y testimonios inventados, en lo que la administración de Donald Trump ve una “campaña intencionada” en su contra.
“Está claro que hemos sido víctimas de una campaña impulsada institucionalmente”, afirma Grenell, en una carta enviada a la redacción de ese medio, filtrada hoy en parte por el diario “Bild”.
El embajador, nombrado el pasado mayo y al que se conocen cercanías con el populismo derechista, reaccionó así al escándalo desatado esta semana, tras salir a relucir que Relotius, un hasta ahora prestigioso periodista paradigma de la prensa de investigación, había inventado testimonios para sus reportajes.
El propio semanario ha admitido las falsificaciones y explicado que éstas ocurrieron a sus espaldas, hasta que finalmente otro periodista, el germano-español Juan Moreno, que trabajó junto a Relotius, sacó a la luz el engaño.
Las primeras sospechas contra Relotius surgieron con la publicación en noviembre pasado de un reportaje sobre la frontera entre EE.UU. y México, en el que había trabajado también Moreno, quien tuvo dudas sobre la autenticidad de los testimonios aportados y lo comunicó a sus superiores.
A partir de ahí, Moreno siguió la pista de algunos de esos testimonios, en posteriores viajes a Estados Unidos, hasta que se evidenció el engaño, lo que trasladó al semanario, en parte para protegerse a sí mismo, al ser coautor.
La dirección de “Der Spiegel” no reaccionó inicialmente al asunto y ahora, a modo de “mea culpa”, dedica esta semana su portada y reportaje principal al asunto, con un total de 23 páginas.
Lo ocurrido “preocupa grandemente a Estados Unidos”, prosigue el embajador, que apunta a que “algunos de los reportajes” de Relotius “afectan la política y a la población estadounidense”.
En opinión de Grenell, la dirección de “Der Spiegel” es corresponsable de lo ocurrido, ya que “fuerza” a sus reporteros a ofrecer un determinado tipo reportajes “que la dirección les exige”.
El escándalo en torno a Relotius afecta la credibilidad no solo de “Der Spiegel”, semanario político de referencia en Alemania, sino de muchos otros medios de la prensa más seria del país, en los que asimismo publicaba sus artículos este autor, quien esta semana renunció a varios de los premios recibidos a lo largo de su carrera.
Relotius, que empezó trabajando en “Der Spiegel” como colaborador independiente, escribió cerca de 60 textos para la revista desde 2011 y en al menos 14 de ellos recurrió a las manipulaciones que ahora se le imputan.
A muchos personajes realmente existentes Relotius les atribuía una biografía inventada y ponía en su boca declaraciones que no habían hecho nunca.
Fuente: EFE
