Raspadilla. (Foto: Municipalidad de Lima)
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En verano es usual que los ciudadanos busquen raspadillas para refrescarse. Sin embargo, la Municipalidad de Lima detectó que estos productos no contaban con las condiciones de salubridad básicas en al menos 30 puestos de venta en Mesa Redonda y el Damero de Pizarro.
Un análisis microbiológico comprobó que los refrescos helados tenían residuos de coliformes fecales debido a la mala manipulación y se verificó que los comerciantes utilizan hielo industrial que no es apto para el consumo humano.
Asimismo, se conoció que los jarabes son preparados con colorantes y preservantes, insumos que podrían ocasionar problemas gastrointestinales y reacciones alérgicas en la piel.
La Municipalidad sugiere a la ciudadanía adquirir las raspadillas en establecimientos comerciales autorizados y limpios, en donde los utensilios empleados sean de acero inoxidable para evitar la aparición de hongos.
De igual modo, los vendedores deben utilizar vestimenta especial: guantes, gorra, tapabocas, zapatos cerrados y uniforme de color claro. No se deben portar ni pulseras ni anillos.
