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A pesar del duro golpe que significa la pandemia del coronavirus para el sector turismo a nivel nacional e internacional, se dio un aumento progresivo de la cantidad de viajeros peruanos tras la reactivación de vuelos nacionales e internacionales. Los peruanos viajaron por la necesidad de regresar a sus hogares, como países de residencia permanente; asimismo, a raíz del largo tiempo de aislamiento y los elevados niveles de estrés en la población, optaron por destinos para descansar y relajarse respetando los protocolos de seguridad sanitaria.
Sin embargo, con la evolución de la pandemia y la implementación de todos los protocolos de seguridad, los peruanos empezaron a viajar en busca de relajo y descanso, que los ayudaría a escapar de la rutina tras tantos meses de confinamiento.
De acuerdo con Despegar, empresa de viajes líder en Latinoamérica, los destinos que eligieron los peruanos durante el 2020 en el plano doméstico fueron: Cusco, Piura, Arequipa, Tumbes, Tarapoto e Iquitos. Además, el turismo alternativo tuvo mucha aceptación, con actividades al aire libre y espacios naturales. En este contexto, están surgiendo nuevas formas de hacer turismo y esta alternativa de espacios abiertos y en contacto con la naturaleza tendrá mayor aceptación en la nueva normalidad. Destinos como Lunahuana, Paracas, Ica, Chincha y la selva central, se posicionaron muy bien el año pasado.
“Al inicio de la reactivación del turismo, la mayoría de los viajes eran individuales. En el último trimestre presenciamos un incremento en los viajes en familia y pareja. Consideramos que el viajero poco a poco aprendió a convivir y entender esta nueva modalidad de hacer turismo, siendo más conscientes de los cuidados y requisitos al momento de viajar. Mientras sigan ofreciendo actividades con los protocolos de bioseguridad, limitando los aforos y cuidando el distanciamiento social, el turismo saldrá fortalecido de esta pandemia”, comenta Inés Hochstadter, country manager de Despegar para Perú y Ecuador.
En cuanto a destinos internacionales, los vuelos con un trayecto de máximo ocho (8) horas fueron los más solicitados, entre ellos: Miami, Nueva York, Ciudad de México y Buenos Aires. Las playas paradisíacas como Cancún, Punta Cana y Cartagena también se sumaron a la preferencia de los viajeros peruanos.
“Cuando se levantaron las restricciones, el interés por los destinos nacionales creció hasta alcanzar el 60% la preferencia de los peruanos, casi el doble de la proporción previa a la pandemia. Sin embargo, con la apertura de vuelos internacionales, estos ganaron interés y se posicionaron como la opción preferida por los viajeros”, indicó Inés Hochstadter, country manager de Despegar para Perú y Ecuador.
Respecto a la estadía promedio de estos viajes, para lugares como México, playas del Caribe y Sudamérica tuvieron un tiempo de permanencia de 7 días. Estados Unidos experimentó periodos de estancias más largas, de entre 15 y 30 días. Mientras que el turismo interno, tuvo una permanencia aproximada de entre 4 y 7 días.