Si tienes puntas quebradizas o maltratadas, puedes recortarlas. (Foto: Morguefile.com)
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Por Ruby Pimentel / @diaffana
El esperado verano y los ansiados días de playa llegaron con fuerza. Por eso es importante tener en cuenta que –así como nuestra piel– el cabello está expuesto a sufrir daños como la pérdida de brillo y color por efectos de los rayos solares. ¿Cómo cuidarlo?
Lo principal es utilizar productos que contengan filtros UV y aplicarlos antes, durante y después de exponerte al sol. Si estás en la playa, no sujetes tu cabello, pues las ligas lo mantienen tenso. Al mojarse, le ocasionarás más daño.
Al término de tu día de playa, debes eliminar los residuos de sal y arena de tu cabello. Primero aplica agua y luego masajéalo con un champú que contenga hidratantes y humectantes.
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De preferencia, que el champú no sea de manzanilla, pues decolorará tu cabello de forma artificial. Los accesorios como gorros, sombreros y pañuelos también te ayudarán a evitar el daño directo.
También debes recortar con cuidado las puntas maltratadas o quebradizas para que tu cabello recobre su fortaleza. De ser necesario, échale productores reparadores. Los puedes encontrar en salones de belleza, centros comerciales o supermercados.
No es recomendable que utilices secadores u otros artefactos que utilicen calor para secar tu cabello. Las planchas y tenazas son fatales si les sumas varios días de exposición al sol, agua salada o piscina.
