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Diez prostíbulos clandestinos que funcionaban bajo la fachada de restaurantes, bares y cevicherías fueron clausurados en Huachipa. Se intervino a cerca de 20 mujeres, entre ellas una menor, que ofrecían servicios sexuales en los sótanos de locales.
Agentes de serenazgo y de fiscalización del municipio de Lurigancho-Chosica, la noche del lunes, detectaron que en los negocios se había acondicionado precarias habitaciones, separadas por cartones y triplay, para que las meretrices ofrezcan sus servicios a los parroquianos, informó la agencia Andina.
Entre las trabajadoras sexuales había una menor de edad y todas fueron llevadas a la comisaría del distrito. Además del cierre de los establecimientos, se destruyeron e incineraron los colchones, frazadas y sábanas hallados.
