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Jenna Desrochers, de 8 años, jugaba en el jardín de la casa de su abuela en Canadá cuando el pitbull de un vecino saltó la reja y la atacó. Honey, el chihuahua de cuatro años de la abuela de Jennna, se lanzó a defender a la niña cuando el perro le mordía el rostro.
Según informó el medio canadiense CBC News, la niña recibió cirugías y cientos de puntos, pero la intervención del chihuahua logró distraer al pitbull, de lo contrario el caso hubiera sido peor.
“El pitbull agarró a Jenna de rodillas, según me dijo su dueño. Básicamente se fue hacia su cara. Luego, el chichuahua apareció…el pitbull persiguió al chihuahua. La distrajo el tiempo suficiente”, declaró la abuela de la menor.
El dueño del perro agresor declaró al mismo medio que este será sacrificado.