Síguenos en Facebook
El Gobierno boliviano no acepta lo que considera un intento de Chile de interferir en asuntos internos de Bolivia, en relación a su demanda marítima en La Haya, advirtió hoy el canciller boliviano, Diego Pary.
“No aceptamos que se pueda intentar interferir en los asuntos internos de Bolivia”, comentó Pary a los medios en referencia a recientes declaraciones del canciller de Chile, Roberto Ampuero.
El responsable boliviano de Exteriores agregó que “se intenta desviar la atención de la opinión pública, distorsionar la esencia de la demanda boliviana”.
Ampuero se refirió en los últimos días a la postura en este asunto del presidente boliviano, Evo Morales, en una serie de declaraciones como con las que este jueves le acusó de haber dado “gran viraje” en su discurso.
“Un día acusa a Chile de querer derrocarlo como Gobierno y al día siguiente pide abrir una nueva era de paz entre ambos países”, dijo el canciller chileno.
Por su parte, Pary apuntó que hasta los próximos días no se decidirá la delegación boliviana que el próximo 1 de octubre acuda a La Haya (Países Bajos), donde la Corte Internacional de Justicia de Naciones Unidas tiene previsto comunicar el fallo de la demanda de Bolivia ante Chile sobre una salida soberana al océano Pacífico.
Al respecto, recordó que las delegaciones de cada país solo pueden escuchar la sentencia, pero no intervenir.
Asimismo, manifestó que los embajadores de Bolivia por el mundo tendrán un papel “fundamental para el trabajo post-Haya”, la estrategia que adopte Bolivia en virtud del fallo.
“Tendrán una participación proactiva”, recalcó en una comparecencia en la Cancillería boliviana en La Paz.
En este contexto, apuntó que una vez conocida la sentencia el Gobierno boliviano podría reestructurar su estrategia, con nuevos equipos de trabajo y “nuevas responsabilidades” de sus integrantes.
“Ahí se analizará el rol que cada uno debe seguir”, concluyó Diego Pary.
Bolivia presentó en 2013 su demanda, para que la corte obligue a Chile a negociar sobre un acceso soberano al Pacífico.
El país perdió en 1879 en una guerra con su vecino unos 400 kilómetros de costa y cerca de 120.000 kilómetros cuadrados de territorio.
Chile argumenta que un tratado de 1904 fijó en forma clara los límites entre ambos países, por lo que la integridad territorial chilena no es negociable para su Gobierno.
Fuente: EFE