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Todavía no hay sucesor para Benedicto XVI. El humo negro emitido desde la chimenea de la Capilla Sixtina, conocido como ‘fumata negra’, confirmó que los 115 cardenales reunidos en el Vaticano aún no se ponen de acuerdo sobre quién será el nuevo papa. Las deliberaciones continuarán este miércoles.
Miles de fieles católicos reunidos cerca de la Plaza de San Pedro se mostraron decepcionados por la ‘fumata negra’. El esperado cónclave empezó esta mañana con una misa en la que los purpurados se encomendaron a Dios para que envíe un pontífice “que abrace la noble misión con un corazón generoso”.
El humo negro significa que ninguno de los candidatos reunió los 77 votos de 115 –dos tercios del total – necesarios para convertirse en sumo pontífice. Los cardenales de 45 países reunidos permanecerán incomunicados mientras perdure la tradicional reunión que se remonta a la Edad Media.
Las normas vaticanas establecen un máximo de una votación el primer día, aunque los cardenales pueden decidir también no celebrarla. La elección del nuevo pontífice continuará el miércoles con cuatro votaciones diarias, dos por la mañana y dos por la tarde.
