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Los constantes viajes a Centroamérica de Hugo Daniel Quintana Bardelli, quien murió asesinado a balazos el miércoles, son una de las principales pistas de la policía para dar con los sicarios que dispararon 43 veces contra su lujoso automóvil Lamborghini.
La División de Homicidios de la Policía cree que hampones mexicanos mataron al hombre de negocios de 45 años. El crimen ocurrió en la cuadra 43 de la avenida Aviación, en Surquillo, y el vehículo de la víctima fue hallado sin placa.
Según fuentes del diario El Comercio, Quintana se habría quedado con parte del dinero obtenido por un envío de droga al extranjero. Debido a ello, los sicarios, que el jueves habrían escapado del país, fueron contratados para asesinarlo.
El Ministerio del Interior confirmó que Quintana Bardelli fue investigado por narcotráfico en 1996. Al respecto, el diario Trome precisó que el hombre de negocios fue detenido en Tacna con 7,5 kilos de droga ese año.
Sin embargo, un juez revocó luego la orden de captura en su contra por aquel delito. Además, en junio de 2013, un burrier extranjero, cuyo nombre no fue divulgado, dio el nombre de Hugo Quintana como uno de sus contactos en Lima.
Debajo del asiento del Lamborghini de Quintana se encontró una pistola Glock. Según fuentes del citado medio, el empresario sabía que estaban tras sus pasos y temía un atentado en su contra. El ataque fue tan rápido que no tuvo tiempo para desenfundar su arma.
Los casquillos que los peritos encontraron en la escena del crimen son de fusiles Galil o AR-15, armas de guerra utilizadas por sicarios de Colombia y México. Ello también confirma que quienes lo asesinaron eran gente con entrenamiento militar.