(Foto: Twitter / Alan García)

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El expresidente Alan García se permitió hacer un análisis del actual periodo gubernamental, indicando que la gestión de Ollanta Humala está “volviendo al chavismo interventor y estatista” a propósito de la presencia del Estado en iniciativas como el gasoducto del sur, el reflote de la refinería de Talara, entre otras.

“El tigre no cambia de rayas aunque quiera. Aquí lo que ha habido es falta de convicción, ha habido oportunismo a la hora de decir ‘adopto el modelo anterior, pero le quieto el pie al acelerador’ (…) De manera subrepticia, estamos volviendo ya no a la Gran Transformación sino al chavismo interventor y estatista’‘, señaló.

En entrevista con Perú21, el exmandatario justificó su advertencia al tomar el caso del gasoducto del sur como ejemplo.

“El gasoducto del sur tenía un proyecto original de US$1.300 millones, aceptado por la misma empresa, que ahora lo va a llevar a cabo como un proyecto público de US$7.300 millones, financiado por los consumidores. Y lo digo porque yo he visto y estudiando el proyecto con la propia empresa (el consorcio Gasoducto Sur Peruano, integrado por la brasileña Odebrecht y la española Enagás)”, señaló.

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En ese sentido, García Pérez opinó que “el modelo más inteligente es atraer capitales de fuera y obligarlos, con buenos incentivos, a invertir en el país”.

“Hagamos la suma: US$3.500 millones en la refinería de Talara, US$5.000 millones en el tren, más el dinero de las factura de todos los peruanos con que se va a pagar el gasoducto del sur, resultado que la economía del Perú está siendo financiada con obras públicas que pudieron haber sido hechas por el capital internacional. Y eso lo va a sufrir el gobierno que venga”, agregó.

De otro lado, Alan García señaló que el gran problema de la gestión de Ollanta Humala “es el liderazgo de arriba” y por eso “no se han hecho las cosas adecuadamente”.

“Me preocupa no solamente pasar de 8% a 4% de crecimiento, sino que se ha perdido la fe del país. Aunque no se hubieran hecho muchísimas más cosas que debieron hacerse, yo sí percibía en pobres, en clases medias, una luz. Eso, el entusiasmo y la alegría del país, se ha perdido”, indicó.

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Sobre el trabajo de la desactivada ‘megacomisión’, el líder del Partido Aprista Peruano (PAP) dijo que está muy tranquilo ante una eventual inhabilitación política porque no ha cometido ningún delito.

“Yo tengo mucha tranquilidad porque soy abogado y no hay elemento alguno por el cual puedan inhabilitarme, ni delito alguno que haya cometido. Durante el gobierno he buscado escrupulosamente, a pesar de las miles de obras que se han hecho y las iniciativas, que no se me vincule a nada que pudiera considerarse delictual. La propia ‘megacomisión’ lo dice”, anotó.

Además, recordó que los informes de este grupo de trabajo “son nulos legalmente” en cuanto a su persona por disposición del Poder Judicial.

“(Los congresistas oficialistas) son mis enemigos políticos. Qué más va a querer la mayoría del parlamento que García no participe (en las próximas elecciones), pero lo único que hacen es hacerme crecer. Se ve tan clara la chanchada que todo el mundo la ve”, sentenció.

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